Death/doom

Como tercer factor, aunque marginal, se puede nombrar a la banda Hellhammer y posteriormente Celtic Frost con su apuesta vanguardista en el metal, puesto que en su segundo disco ya había probado la integración del sonido de la primera ola del rock gótico.

Su primer álbum, Lost Paradise, no era una apuesta tan arriesgada pero reducía en general el tempo de su death metal y en la canción Breeding Fear introducía voces femeninas.

Esa canción reducía su ritmo, y en el muro sónico introducía un violín (una vez más gracias a Dead Can Dance) con un sonido sumamente siniestro, al mismo tiempo que su vocalista, Aaron Stainthorpe, ponía en juego unas líricas que recuerdan al trabajo del poeta inglés Lord Byron, pero con un sesgo mucho más obscuro, y algunas veces depravado.

Como caso aparte, aunque no menos importante, se puede nombrar la formación de Cathedral, con Lee Dorrian a la cabeza (ex-Napalm Death).

Este grupo, a diferencia, del resto de las bandas nombradas, basó su sonido solo ligeramente en el death metal (en la voz).

Luego del primer álbum, sin embargo, la banda cambiaría el curso de su música, enfocándose cada vez más en ritmos psicodélicos.

La fórmula comercial no tardó en hacer efecto y pronto "la tríada Peaceville Records" se apoderaba de Europa.

El doom metal comenzaba a ser un negocio redituable y así lo demostraron las bandas que, tomando la influencia del sonido británico de Peaceville Records, pronto lideraban una nueva ola de heavy metal nórdico: Amorphis, Lacuna Coil, Theatre of Tragedy y Tristania, entre otras, sin ser bandas de doom metal, pronto se convertirían en auténticas estrellas del mundo metalero europeo gracias a esta revolución europea.

En 1993 la banda liderada por Renato Gallina, diSEMBOWELMENT, lanzaba su primer y único larga duración con el titulado: Transcendence into the Peripheral.

Sin embargo, con el cambio editorial sufrido en aquel canal en la mitad de esa década, enfocándose a la telerrealidad y al pop punk, el metal en general desapareció de la cartelera del canal, y con el tiempo las bandas pioneras del subgénero comenzaron a experimentar con otros sonidos, dejando sin una base identitaria al death/doom.

De las bandas que dieron vida a este subgénero, solo My Dying Bride se ha mantenido cercana a sus raíces, conservando parcialmente las voces guturales, las guitarras pesadas, y en el año 2009 agregando nuevamente una violinista (Katie Stone, aunque solo duró en el grupo un año, fue oportunamente reemplazada por el joven Shaun MacGowan).

La prensa especializada al no haber previsto tal fenómeno, solo logró categorizarlo llamándolo metal gótico, lo cual es un error, ya que este "período intermedio" apenas comparte características con bandas relevantes de tal género como Tristania o Sirenia (guitarras punzantes al estilo del black metal, con ritmos más acelerados que los del doom, voces soprano).