El cáncer de próstata precoz, normalmente no produce síntomas y se detecta por una elevación del PSA o realizando un tacto rectal.
El patólogo, un médico especialista en diagnosticar enfermedades en muestras de tejido, determinará si existe células cancerosas en la biopsia, examinándola al microscopio.
La biopsia de la próstata es esencial para confirmar el diagnóstico y está indicada cuando se descubre alguna nodularidad al realizar el tacto rectal, al determinar una elevación del PSA sérico o alguna alteración en las pruebas de imagen, o bien cuando aparecen síntomas del tracto urinario inferior en un varón que no tiene causas conocidas de obstrucción.
[1] Este sistema asigna un grado Gleason del 1 al 5, de mayor a menor diferenciación, basado en el parecido de las células cancerosas al tejido normal prostático, a los tipos histológicos glandulares dominantes y secundarios.
Si la puntuación Gleason es muy alto, lo más probable es que el cáncer crezca y se extienda muy rápidamente.
Generalmente pertenecen a dos categorías: "atípias" o Neoplasia Intraepitelial Prostática (PIN).
Por esta razón, se recomienda repetir la biopsia de próstata en estos casos.
Si se confirma un cáncer, es necesario realizar más pruebas diagnósticas para saber la extensión del cáncer dentro de la próstata, fuera pero en la vecindad de la próstata o en otras partes del cuerpo (enfermedad a distancia, diseminada o metastásica).
Se deben explorar si los surcos prostáticos están presentes o borrados y si la palpación e las vesículas seminales es normal.
También hay que palpar los ganglios linfáticos inguinales en busca de adenopatías metastásicas.
El TAC no se usa como la resonancia magnética para evaluar la glándula prostática.
Para realizar un TAC el paciente se acuesta en una mesa alargada, y la parte de su cuerpo que va a ser examinada, se desplaza dentro del escáner, una máquina en forma de donut que rodea completamente a la mesa.
La inyección del contraste puede ocasionar acaloradas, rubor y picor por todo el cuerpo.
Algunas personas son alérgicas y pueden tener serios problemas como shock anafiláctico.
Los pacientes deberían comunicar a su médico si alguna vez han tenido una reacción al contraste radiológico.
También es necesario tener la vejiga urinaria llena para desplazar el intestino del área donde se encuentra la glándula prostática.
En algunos servicios de radiología proporcionan unos auriculares con música para evitar este ruido.
Las mejores imágenes de la próstata con la tecnología actual disponible se obtienen con la RMN endorrectal.
Las áreas de los huesos dañadas presentan más radiactividad y aparecen como puntos negros en el esqueleto (captación o acúmulos).
Para distinguir mejor estas captaciones, se solicitan otras pruebas de imagen como radiografías simples, TAC, RMN o incluso biopsia de hueso para valorar mejor estas captaciones.
Ambas pruebas muestran las áreas del cuerpo donde se acumula el material radiactivo.
En este caso, el anticuerpo reconoce específicamente el antígeno prostático específico de membrana (PSMA), una sustancia que se encuentra en niveles altos en las células normales y cancerosas de la próstata.
Si la probabilidad de que el cáncer esté extendido es baja, muchos cirujanos no practican la biopsia extemporánea por congelación y envían a examinar los ganglios linfáticos junto con la próstata cuando realizan una prostatectomía radical.
El cirujano extrae todos los ganglios linfáticos localizados alrededor de la glándula prostática utilizando instrumentos quirúrgicos especiales manejados a través del laparoscopio y los envía al patólogo.
El masaje prostático para la obtención de líquido está contraindicado en esta situación aguda, por lo que este diagnóstico se confirmará con un cultivo de orina positivo para el agente causal.
Causada por infección bacteriana, tuberculosa, fúngica o por protozoos puede dar lugar a una masa clínicamente indistinguible del cáncer.
El tumor no ha podido ser detectado con ninguna técnica de imagen como la ecografía transrectal.
El cáncer ha sobrepasado los límites de la próstata y puede afectar a las vesículas seminales.
Además del TNM, otros sistemas pueden usarse para estadiar el cáncer de próstata.
El cáncer de la próstata, al igual que otros tipos de cáncer y otras enfermedades, es altamente hereditario, por lo que es importante que cualquier hombre mayor de cuarenta años, cuyos parientes cercanos (padre, hermanos, tíos, etc.) padezcan o hayan padecido tal enfermedad, mantenga una vigilancia periódica y esté alerta a los síntomas.