Dagoberto de Pisa

Demostró gran competencia en su cargo, aunque fomentó la corrupción en la organización de los territorios conquistados a los moros.

Se adueñó, según los rumores, del dinero enviado por el rey de León al papa.

Viajó hacia el Oriente con una flota pisana, realizando actos de pillaje en varias islas del Mar Egeo, pertenecientes al Imperio bizantino, cuyo emperador envió una flota a detenerlos, sin embargo no consiguieron capturar a los pisanos.

Este, para solucionar el asunto, envió al nuncio Mauricio, obispo y cardenal de Oporto.

Balduino rápidamente mostró la carta que envió Dagoberto a Bohemundo para impedir su coronación, y le acusó, falsamente, de intentar asesinarlo.

Sin embargo, en ese momento llegó un nuevo enviado del papa, Roberto, cardenal de París.

Dagoberto decidió ir personalmente a Roma para informar al papa Pascual II.

[4]​ Sin embargo, Dagoberto consiguió convencer al papa de su inocencia, y fue repuesto como Patriarca, deponiendo rápidamente a Eremaro.