A la muerte del califa almohade Al-Mustansir Yusuf, en enero de 1224 , se produce una lucha por el poder entre los almohades, que se resuelve reconociendo como califa a Abu Muḥammad'Abd al-Wahid.
En 1228, Muhammad Ibn Hud, encabezando una revuelta antialmohade que termina desintegrando el imperio, conquista Murcia donde se proclama emir y reconoce al califa abasí.
En esta situación caótica, agravada por el hambre, ese mismo año se produce una revuelta en Valencia, que aprovecha Zayyan ibn Mardanish, descendiente de Muhammad ibn Mardanis, el llamado Rey Lobo por los cristianos, para sublevarse en Onda.
El 24 de enero de 1229 Zayyan entra en Valencia, proclamando obediencia al califa abasí, y Abū Zayd se refugió primero en Segorbe y luego se dirige a Aragón..
En virtud del pacto, Blasco de Alagón, con otros nobles aragoneses, atacó la frontera el 1231, tomando Morella y provocando que Jaime I el Conquistador tomara Ares para evitar una campaña descontrolada de Alagón y los nobles aragoneses.