Constitución de Cundinamarca

En la ciudad habitaban algunos de los criollos más influyentes del Virreinato (próceres de la talla de Policarpa Salavarrieta y Antonio Nariño), por lo que en gran medida fue allí donde se gestó el movimiento independentista en el que se destacan los hechos que se conocen como el evento de "El Florero de Llorente", cuando los hermanos Francisco y Antonio Morales entraron a pedir prestado, para adornar una cena con un funcionario real llegado de España, un florero al comerciante español José González Llorente, que tenía un almacén en la esquina nororiental de la hoy llamada Plaza de Bolívar, siendo rechazados de mala forma por éste, lo que fue tomado como una excusa para provocar una reyerta que terminó en disturbios entre la población.

Durante dicho año de 1810 los revolucionarios se reunieron en diversas juntas, proclamando así la independencia de España, aunque no en términos absolutos.

[2]​ Estos últimos se dividieron, a su vez, en centralistas (liderados por Antonio Nariño) y federalistas (liderados por Camilo Torres).

[2]​ El 8 de octubre de 1812 el gobierno federal le ordenó a Nariño ajustar la legislación del Estado al pacto federal a lo cual Nariño se negó, lo que provoca que finalmente ambos bandos se enfrentaran en una guerra civil entre Centralistas y Federalistas, que se llevó a cabo entre 1812 y 1813.

Y habiendo expedido en estos términos la convocatoria, los Pueblos dieron a sus Electores el carácter y facultades de Revisores de la citada constitución, con poderes bastantes para aclararla, exponerla, y reformarla, añadir, o quitar lo que hallásemos conveniente a la seguridad del Estado.