Se trata de un municipio hispanófono, en el que el español cuenta con el predominio lingüístico reconocido legalmente.
El pueblo se encuentra en la confluencia de los ríos Júcar y Cabriel.
Este último llega procedente del término de Jalance y tiene un recorrido extraordinariamente sinuoso en dirección sur-norte.
[2] En las terrazas de los dos ríos se encuentran al aire libre, sílex considerados mesolíticos.
Este mismo castillo fue destruido durante la Guerra de la Independencia y reparados varios torreones y lienzos de murallas durante las guerras carlistas.
En regadío se producen hortalizas, verduras, patatas y frutales (melocotón, albaricoque, cerezos, manzanos, perales, etc.).
La actividad económica de esta población gira en torno a su central nuclear.
En el término hay muchas fuentes, siendo la más importante el manantial de Los Hervideros.
Este barco es accesible todo el año gracias a disponer de aire acondicionado y calefacción, siendo gestionado por la empresa Rutas Fluviales del Júcar, S.L.
Se prepara con mosto, aguardiente, café, canela, matalahúva y azúcar, si bien es cierto que cada familia lo elabora de forma diferente y le da su toque particular.