Ciencias humanas

Las modernamente denominadas Ciencias humanas constituyen una entidad fundada en la Antigüedad clásica, con posterioridad humanísticamente delimitada, tras el régimen medieval del Trivium et Quadrivium, mediante la designación secular de Studia humanitatis (es decir, característica y centralmente Gramática, Retórica, Dialéctica, Poética, Poesía o Literatura como disciplina y lectura del canon clásico, Historia, Filosofía, especialmente Ética o Filosofía moral).

[6]​ La historia de las ciencias humanas asienta en una antigüedad primigenia por principio fundada en saberes profundos pero indiferenciados cuya referencia indiscutible se encuentra en Pitágoras.

"Llamamos comprender al proceso en el cual se llega a conocer la vida psíquica partiendo de sus manifestaciones sensiblemente dadas".

Los métodos cuantitativos y estadísticos, si bien pueden ejercer subsidiariamente alguna función en la investigación científico-humanística, según en sana lógica cabe comprender, en ningún caso son susceptibles de desempeñar alguna función decisoria ni constante en Ciencias humanas, a diferencia de las Ciencias sociales, en las cuales desempeñan a menudo un procedimiento característico o imprescindible.

Existe una discriminación que divide en ontológicas, metodológicas y epistemológicas, pero cuyos solapamientos devienen insostenible desajuste.

Sin embargo, ya no es frecuente considerar la Gnoseología o Teoría del Conocimiento, la específica disciplina filosófica de determinación cognoscitiva, como primera ciencia.

Entre las tradicionales ramas disciplinares de la Filosofía se cuentan fundamentalmente la Metafísica, la Ontología, la Gnoseología, la Lógica, la Ética y la Axiología.

Dentro de la Filología Románica posee especial dimensión la Filología Española en tanto que Filología Hispánica, de extraordinaria expansión americana, y sus múltiples subcampos, extremadamente desde la Iberística originaria hasta el sefardí o el Filipinismo asiático e incluso un dominio peninsular ibérico originalmente no románico como el vascuence, además de sus variantes románicas peninsulares como la gallega, la valenciana y la catalana.

[12]​ A veces «exégesis» y «hermenéutica» se usan como términos sinónimos, pero la hermenéutica es una disciplina metodológica más amplia por cuanto resulta difícil fijar sus límites y puede abarcar no solo la comunicación escrita, verbal, sino también no verbal.

[15]​ Algunos intelectuales ajenos a la tradición humanística, como Murray Rothbard, consideran la hermenéutica un «sinsentido mistificante» e «incomprensible».

Este campo abarca una amplia gama de aspectos, que incluyen mitos, rituales, valores, actitudes, comportamientos, doctrinas, creencias e instituciones religiosas.

Este análisis se lleva a cabo de manera imparcial para alcanzar conclusiones objetivas.

No solo abarca, sino que también sistematiza las conclusiones derivadas de una variedad de disciplinas, que incluyen la filosofía, la filología, la historia, la arqueología, la antropología, la sociología, la psicología y, en tiempos más contemporáneos, incluso la neurobiología y otras ciencias cognitivas.

Entre los pioneros de este movimiento se destacan figuras como Friedrich Max Müller en Inglaterra y Cornelis Petrus Tiele en los Países Bajos.

A principios del siglo XX propuso Benedetto Croce un barrido de la techne epistemológicamente reordenador.

La segunda mitad del siglo XX ha estado determinado especialmente por la teoría problemática de Theodor Adorno, en nuestro tiempo sometida a crítica.

A ello se ha de sumar, ya sistemática y establemente desde la Poética aristotélica, la danza.

Todas estas artes son, pues, objeto de estudio histórico, teórico y crítico.

La musicología se ha definido y desarrollado de manera muy diferente según las diversas tradiciones nacionales.

La historia como materia política es parcialmente una ciencia social que estudia el pasado de la humanidad.

Habitualmente se reconoce a la "historia de las ideas" cierto parentesco metodológico con la literatura comparada y, en general, la comparatística.

Ambas se refieren a objetos constitutivamente diferentes al tiempo que pueden ser reintegrados como parte.

Característicamente definen formas del pensamiento contemporáneo, largamente maduradas y que culminan estableciéndose durante la segunda mitad del siglo XIX, sobre todo a manos, respectivamente, de Jacob Burckhardt y Marcelino Menéndez Pelayo.

Entre ellas, puede haber coincidencias o, por el contrario, claras incompatibilidades;[36]​ esta variedad da pie a múltiples acepciones y abordajes.

La psicología emplea métodos empíricos cuantitativos y cualitativos de investigación para analizar el comportamiento.

Aunque la mayor parte de los psicólogos están involucrados profesionalmente en actividades terapéuticas (clínica, consultoría, educación), una parte también se dedica a la investigación, desde las universidades, sobre un amplio rango de temas relacionados con el comportamiento y el pensamiento humano.

Las ciencias del derecho o ciencias jurídicas son todas aquellas disciplinas que buscan explicar las características del derecho, entendido como un fenómeno que existe más allá de su dimensión positiva, esta última objeto propio de la dogmática jurídica.

La expresión «ciencia del derecho» refiere a la dogmática jurídica, con exclusión de otras perspectivas.

Aunque estas técnicas y saberes se relacionan con la actividad de la persona, muy poco tienen que ver con las humanidades.

Ha existido tradicionalmente una fuerte vinculación, aun epistemológicamente por completo externa, entre medicina y cultura humanística.

Wilhelm Dilthey (1910)
Hermes , mensajero de los dioses, la inspiración del nombre hermenéutica.
Diversos símbolos de religiones.
Estudiantes atentos
Educación al aire libre
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) forman parte del nuevo escenario educativo.
Psi (Ψ) , letra griega comúnmente asociada con la psicología.