Rally de China

Sin embargo los daños ocasiones por las tormentas obligaron a la organización cancelar la prueba en el mes de agosto.En aquellos años el mercado chino era virgen en el terreno automovilístico y las marcas veían con buenos ojos la entrada de una prueba en el país asiático.La FIA esperaba que las autoridades chinas organizaran un rally al estilo del Hong Kong-Pekín, una prueba que formaba parte del campeonato de Asia-Pacífico, sin embargo la prueba que se diseñó sorprendió tanto a pilotos, como a las marcas y a los periodistas.Se planeó un recorrido en el interior del país a casi 40 km del núcleo habitado más próximo, y los equipos se alojaron en hoteles casi cuartelarios, y las autoridades intentaron evitar el contacto con la población local.Para colmo la carrera fue mal organizada, con la presencia de la lluvia que tampoco ayudó, por lo que la FIA decidió no volver a incluirlo en el calendario del mundial[2]​ y fue sustituida por el Rally de Chipre.
La ceremonia de final de carrera se celebró a los pies de la muralla China .