[4] Uso que aún no se ha concretado, encontrándose vacía y sin uso desde 2018.
[5] El GAM se ubica en la Alameda 227, junto a la estación Universidad Católica del metro.
Diversos visitantes afirman haberlo visto merodeando las instalaciones, con mayor frecuencia en los estacionamientos del edificio principal.
La ministra del ramo, Nivia Palma, anunció que se convertiría en un espacio abierto a las organizaciones de tipo cultural y social;[4] en abril, Palma informó que la decisión de conceder gratuitamente un piso completo a la Fundación Víctor Jara en el inmueble, que debe estar operativo en el segundo semestre de 2017.
[28] El incendio movilizó a 28 unidades del Cuerpo de Bomberos de Santiago y mantuvo la Alameda cerrada desde Plaza Baquedano hasta el Cerro Santa Lucía, además de suspender la atención del metro en la estación Universidad Católica, ubicada bajo el edificio.
[29] Se llamó a propuesta pública y el 15 de diciembre de 2007, veintiún meses después del incendio, se anunció que había ganado el proyecto del arquitecto Cristián Fernández en conjunto con la oficina Lateral Arquitectos.
[30] El GAM aprovecha la infraestructura del que fuera Centro de Convenciones reinterpretada por los arquitectos.
[39] En 2015 inició la construcción de la ampliación del centro cultural, que pretendía inaugurarse en 2017.
Diversas dificultades, como la inundación por el desborde del río Mapocho en 2016, y la quiebra de la empresa constructora, llevó a que en 2018 se paralizaran las obras.
Se espera que los trabajos definitivos comiencen en 2021, para estar listos en el primer semestre de 2024.
En un principio, existían señales diseñadas especialmente para poder hacer un recorrido de todas las instalaciones.
[43] A principios de la segunda década del siglo XXI, en septiembre de 2010, el Centro Gabriela Mistral logró "rescatar e integrar a su nueva arquitectura once de estas obras originales, las que han sido restauradas y reubicadas en los nuevos espacios".
Como dijo el Premio Nacional de Arte 2009 es “una obra no sólo para mirarla, sino para sentarse en ella, para ocuparla”.