[1][2][3] Según el documental de la BBC "Decadence and Downfall: The Shah of Iran's Ultimate Party", la planificación para el evento tardó un año.
[2][4] Mientras que la prensa y personal de apoyo serían alojados en Shiraz, las festividades principales se llevarían a cabo en Persépolis, razón por la cual se construyó una elaborada ciudad de tiendas.
Toda la celebración fue televisada al mundo por medio de una conexión satelital en el lugar.
[1] Entre los invitados estuvieron:[2][3] A la reina británica Isabel II se le aconsejó no asistir por razones de seguridad.
[2] El emperador de Japón Hirohito y el presidente mexicano Luis Echeverría faltarían también.
Ese día en la noche, una "fiesta tradicional persa" de naturaleza menos formal se llevó a cabo en el salón de banquetes, poniendo fin así a las celebraciones en Persépolis.
Las festividades concluyeron con el sha rindiendo homenaje a su padre, Reza Shah Pahlevi, en su mausoleo.
Los críticos argumentaron que el dinero usado en las celebraciones podría haber sido utilizado en otras necesidades del país.
[8] En 2005, fue visitado por casi 35.000 personas durante las celebraciones del año nuevo iraní.