[2] Tras la batalla de Atapuerca en 1054 los navarros abandonaron la fortaleza y la comarca retornó a Castilla.
[1] En el 1170, Alfonso VIII se lo donó en arras a Leonor Plantagenet.
El castillo presentaba planta pentagonal adaptándose al perímetro de la peña donde se ubica.
La torre del homenaje y la puerta principal se situaban al norte.
En uno de los lienzos de muralla que aún se conserva, estuvo embutida hasta principios del siglo XX una lápida con una inscripción en latín que fue expoliada y hoy se encuentra desaparecida.