Es una batería costera erigida en el siglo XVIII, sobre una superficie rocosa de poca altura, cercana al mar Mediterráneo.
La fortificación comienza a ser construida en torno al año 1769, pero durante la Guerra de la independencia española —entre 1808 y 1814— es destruida por el ejército inglés, para evitar su uso por parte de tropas francesas, por lo que tuvo que ser reconstruida en 1817.
Un foso, sobre el que se alzaba un puente levadizo, había de ser superado para llegar a la entrada principal del castillo.
Para llegar al terrado, había que utilizar unas escaleras situadas en el patio de armas.
A los cuatro cañones, en la batería semicircular, de 24 libras cada uno, se llegaba tras superar una rampa.