Capilla Sansevero

[5]​ La devoción del detenido no cayó en saco roto y poco después se reconoció su inocencia.

Tras ser liberado, restauró la Piedad y dispuso que siempre hubiera una lámpara de plata encendida ante la imagen.

El duque de Torremaggiore, Giovan Francesco di Sangro[6]​ se encomendó a la Virgen estando gravemente enfermo, y al sanar milagrosamente hizo construir una capilla que los fieles llamaron la Pietatella.

[5]​ En los años sucesivos, el príncipe Raimondo contrató artistas de fama internacional como Giuseppe Sanmartino, Antonio Corradini, Francesco Queirolo y Francesco Celebrano: es en este periodo cuando se realizaron obras maestras como el Cristo Velado, el Desengaño y la Modestia.

[14]​ Un gran arco separa la nave del presbiterio, ubicado al extremo de la iglesia, donde se encuentra el altar mayor.

[15]​ Sobre los arcos, recorre toda la capilla una cornisa elaborada con una masilla ideada por el príncipe Raimondo, sobre la que se extiende la bóveda de cañón que corona el templo, decorada en su totalidad por el fresco Gloria del Paraíso, de Francesco Maria Russo.

[16]​ Sobre la cornisa se abren seis ventanas de ancho vierteaguas interior que proporcionan luz a la capilla.

Todas las obras que alberga la capilla, excepto cuatro, fueron encargadas por Raimondo di Sangro, y a ellas contribuyeron artistas de la talla de Francesco Celebrano, Antonio Corradini, Francesco Queirolo y Giuseppe Sanmartino.

El elemento más notable de la capilla Sansevero son, sin duda, las estatuas, que obedecen a un proyecto iconográfico ideado y diseñado por Raimondo di Sangro, en el que los artistas fueron a menudo simples ejecutores.

[13]​ Casi todas las virtudes fueron esculpidas según las normas iconográficas establecidas por Cesare Ripa en su obra Iconología, lectura especialmente apreciada por Raimondo, que financió una reedición en cinco volúmenes.

Por ejemplo, en la representación de la Modestia ─obra dedicada a Cecilia Gaetani, madre de Raimondo di Sangro─ la figura femenina velada se ve como referencia a la diosa egipcia Isis,[19]​ que desempeña un importante papel en la ciencia iniciática.

[5]​ Según la intención del príncipe Raimondo, el Cristo Velado, elemento central de la última gran reforma, debía colocarse en la cámara subterránea junto a los futuros sepulcros de los Sansevero, iluminado por las lámparas perpetuas ideadas por el propio príncipe.

Sin embargo, lo más probable es que la escultura nunca haya llegado a ubicarse en dicha cámara.

Raimondo di Sangro , príncipe de San Severo, que ideó la capilla tal y como la conocemos
Lápida con la dedicatoria de Alessandro di Sangro sobre la entrada de la capilla Sansevero
La capilla en el siglo XIX . Se aprecian las diferentes estatuas, y el Cristo Velado a los pies de la Modestia. El autor de la imagen es el fotógrafo alemán Giorgio Sommer
Carta cifrada según el código Rosacruz , que contiene información sobre el significado de las esculturas y el proyecto iconográfico creado por Raimondo. A la profesora Clara Miccinelli se debe su decodificación
La capilla vista desde la cornisa
Plano de la capilla Sansevero con indicaciones de las principales obras
Plano de la capilla Sansevero con indicaciones de las principales obras