Solo pudieron ejecutarse los primeros 25 km del canal y la presa de El Gasco, su embalse regulador.
Una función adicional del canal del Guadarrama era su navegación para poder transportar piedra desde la sierra lasta las numerosas obras que se estaban construyendo en tiempos de Carlos III en Madrid y Aranjuez.
El canal se unía posteriormente con el Jarama hasta llegar a Aranjuez (Madrid) y al río Tajo.
Superado este punto, se unía con el Guarrizas, el Guadalén y el Guadalimar, hasta llegar a Córdoba y Sevilla, confluyendo con el Guadalquivir, río que es navegable desde esta última ciudad hasta su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).
Carlos Lemaur recurrió en su proyecto a un sistema de esclusas económicas, previamente ensayado en el canal de Ypress (Francia),[1] mejorado por Lemaur para reducir el gasto de agua a la cuarta parte y que hubiese permitido salvar los desniveles del terreno y las divisorias atravesadas por el canal.
Esta presa empezó a construirse en 1580 por los regantes y se paralizó 4 años después.
El canal del Guadarrama fue diseñado en 1785 por el ingeniero de origen francés Carlos Lemaur.
Su trazado se detalla en el documento Relación del proyecto de un canal navegable desde el río Guadarrama al Océano, que pasará por Madrid, Aranjuez, La Mancha y Sierra Morena: orden y método para acertar en su ejecución, que se conserva en el Archivo Histórico Militar de Madrid.
Entre las causas probables que sí son comprobables directamente mediante inspección visual, se encuentran las siguientes:
La causa remota se debe a la mala calidad constructiva del muro de soporte, admitiendo que en este caso tampoco ayudó la construcción casi vertical del muro, carente de un talud apreciable.
En cuanto a la causa inmediata, casi todas las opiniones coinciden en que la acumulación del agua caída durante la tormenta, unida al barro formado por las tierras de relleno de las celdas inmediatas al muro y las piedras de relleno desprendidas, pudieron originar una presión excesiva sobre las últimas filas de mampostas del muro, con juntas aún no fraguadas o poco fraguadas que provocó su derrumbamiento.
Al caer estas mampostas de las últimas filas, a su vez originaron un momento de vuelco sobre las filas inmediatas inferiores, que fueron arrastradas en la caída, dejando el muro en la situación en la que se puede ver actualmente.
Esta circunstancia y las restantes medidas económicas adoptadas por el ministro del ramo, Miguel Cayetano Soler, todas desconcertantes y mal acogidas en el momento, originaron una coyuntura especialmente problemática para la hacienda.
Especialmente el derrumbamiento de la presa de Puentes con sus trágicas consecuencias, paralizó o ralentizó las planificaciones hídricas que se llevaron a cabo no sólo en España, sino también en Europa en los años siguientes.
El proyecto presentado por Felipe Mora en 1892, para el aprovechamiento del canal, incluía un nuevo pantano en Villalba, complementado con otros pantanos menores y 4 saltos que producirían una potencia eléctrica de 4.000 CV.
El proyecto fue aprobado por la Dirección de Obras Públicas y visado por el Gobierno.