Por ello, el monarca español tuvo que buscar una ruta alternativa por tierra.
La mayor parte del Ejército de Flandes se desplazó por el Camino Español, realizando una hazaña logística asombrosa para su tiempo.
Quedó así abierto el Camino Español, que se utilizaría entre 1567 y 1622 (o 1633, según la fuente).
[nota 1] Tras la operación, los principales líderes rebeldes fueron ajusticiados, entre ellos el conde de Egmont.
Aceptó las reclamaciones de los calvinistas en el Edicto perpetuo y comenzó a replegar su ejército.
Pero con aquel gesto no cesó la oposición, y al año siguiente llegó un ejército mandado por Alejandro Farnesio, que derrotó a los rebeldes.
Las provincias calvinistas del norte (Holanda, Frisia, Zelanda, Utrecht, Güeldres, Groninga y Overijssel) se asociaron en la Unión de Utrecht (1579), declarándose independientes y opuestas a la soberanía de Felipe II.