Bajo la fuerte presión política de la derecha, se ve forzado a dimitir al resultar salpicado por las derivaciones del llamado caso Stavisky.
Poco antes del Anschluss dimitió como jefe del Gobierno, aunque fue ministro en el Gobierno de Paul Reynaud entre 1938 y 1940, y vicepresidente del Gobierno en los Gobiernos de Édouard Daladier, y en el siguiente Gobierno de Paul Reynaud.
No obstante, abandonó el Gobierno del mariscal Philippe Pétain en julio de 1940.
Acabada la guerra, repartió su vida entre París y Washington, donde seguía residiendo su familia.
En su juventud fue un jugador de rugby a 15, en el equipo senior del Stade Français de París, según Henri García, historiador del rugby francés.