Cabale

[8]​ Llamada a dar su opinión, la Academia francesa[9]​ censuró esta tragi-comedia escrita para teatro, pero el cardenal Richelieu no quedó satisfecho, porque elogios se mezclaron a las críticas al poeta.

Al inicio engañado por esta maniobra, el público sin embargo no tardó en asignar a las dos piezas sus respectivos méritos, y entonces Pradon no tuvo otra salida que consolarse, señalando a un imaginario cabale como la causa de su insuceso.

Si la maniobra tenía éxito, si el cabale conseguía su efecto, la obra desacreditada quedaba poco tiempo en cartel, lo que precisamente era la forma de censura buscada por los cabalistes.

Bajo el reinado de Louis XVI en Francia, dos famosos cabales rivalizaron tanto en la corte como en la ciudad.

Entre los cabales que en su momento molestaron a diversos actores, no obstante lo cual su respectiva reputación sobrevivió el paso del tiempo, corresponde citar las disputas y los enredos que se sucedieron durante diecisiete meses, en oportunidad de los inicios en la actuación del comediante Henri-Louis Caïn (Lekain).

Primero por cierto en sus comienzos (y aún en el siglo XVIII), cuando intentó la reforma de vestuario ya sugerida por Lekain, casi todos se pusieron en su contra, repitiendo incansablemente las palabras de Louise Contat[15]​ que se indican seguidamente:

[22]​ Sólo la providencial ausencia de esta última entre 1808 y 1813, período en el que sobre todo estuvo en la corte del zar Alejandro I de Rusia, puso una pausa en esta rivalidad entre las dos actrices, y en los cabales que en este marco se ponían en juego.

No obstante ello y algunas veces, las rivalidades de intereses, las pasiones políticas o religiosas, en algunas raras ocasiones las convicciones literarias, hicieron surgir incluso en París cabales más o menos efímeros, por causa de los cuales algunos silbidos o abucheos se hacían sentir unos pocos días, y luego se acallaban.

En un determinado momento, este concepto se puso suficientemente a la moda en Europa, pues incluso traspasó las fronteras francesas.

Entre otras, recuérdese por ejemplo una obra de 1783-1784 del dramaturgo alemán Friedrich von Schiller:[23]​[24]​ Cabale y Amor (o Intriga y Amor), en alemán Kabale und Liebe, en francés Cabale et Amour,[25]​[24]​ en inglés Intrigue and Love.

Ilustración cómica de un cabale (textos en francés).
Carlos II de Inglaterra dirigió el Ministerio de la Cabale
entre 1669 y 1674.
Cartel de la representación en París en 1637.
Fedra de Jean Racine , víctima de un cabale.
Frontispicio de las Memorias de M lle Clairon (Paris 1799)
M lle Dumesnil interpretando Athalie , tragedia de Jean Racine
La tentativa de reforma en el vestuario de Talma , originó un cabale en su perjuicio; arriba, el actor interpretando al personaje principal en la tragedia Cinna de Pierre Corneille .
Tapa de la primera edición en alemán (1784) de la obra "Kabale und Liebe"