[5] Con el microscopio óptico los hepatocitos se ven como células prismáticas con un diámetro de 20-40 μm.
[3][5] Si lo que se considera es el drenaje venoso, el lobulillo hepático está formado por cordones de hepatocitos, que se disponen en forma radial, en un espacio hexagonal con centro en la vena centrolobulillar.
Muestran gránulos densos en su matriz mitocondrial, formados por calcio, hierro y magnesio.
[2] El hepatocito está situado fisiológicamente en la interfaz entre: el exterior del organismo, representado por la vena porta de sangre variable, que llega desde los intestinos, páncreas, bazo y, por otro lado, el medio interno arterial constante y filtrado.
[10] Los hepatocitos secretan factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF en inglés), que permite la proliferación y supervivencia de las células endoteliales sinusoidales, así como su capacidad para formar fenestraciones.
[11] En los hepatocitos el recambio es bajo y tienen una vida relativamente larga que se ha calculado en 120-150 días.
[8][14] En un porcentaje variable 20-25 % se observan dos núcleos en un hepatocito, de origen endomitotico por cariocinesis sin citocinesis.