Buen amigo (tango)

Una noche del año 1924 estaban cenando el eminente cirujano Enrique Finochietto con el doctor Pedro Chutro y con Florencio Lezica en el suntuoso cabaré Chantecler cuando el director de la orquesta Julio De Caro bajó del escenario y, violín en mano, se acercó lenta y respetuosamente a la mesa y, dirigiéndose a Finochietto, señalando con el arco hacia uno de los mozos, le dice —Doctor Finochietto, a aquel mozo que usted ve triste y llorando, le han dicho que su mujer se morirá esta noche por una enfermedad grave del abdomen.—No se aflija, amigo —respondió el médico, que dejó los cubiertos y dijo: “Vamos a ver a esa señora.” Esa misma noche, casi de madrugada, hizo el diagnóstico y la intervención quirúrgica que se requería para salvar a la paciente, haciéndose cargo de todos los gastos.[1]​ De Caro en sus memorias da una versión ligeramente diferente del hecho, indicando como esposo de la paciente no ya a un mozo del cabaré sino a un amigo al que identifica como “Tito”.Lo estrenó de inmediato en el Chantecler, debió repetirlo varias veces a pedido del público y cuando esa noche llegó Finochietto el director pudo dedicárselo personalmente.[2]​ Amuchástegui y Del Priore informan que no obstante la historia narrada, en partituras posteriores el tango apareció dedicado “a Sebastián Lezica”.
Ernesto Sabato, Ben Molar y Julio de Caro.
Orquesta Típica Julio De Caro