Bolsa de suicidio
Se suele inhalar un gas como el helio o el nitrógeno en estos dispositivos, porque pese a estar privando al cuerpo de oxígeno, la persona exhala CO2 de forma natural y, por lo tanto, no se produce ningún pánico.En estas circunstancias, la muerte es pacífica con alguna posible sensación de euforia debido a la hipoxia hipocápnica descrita.Desde el año 2000 existen guías en internet, tanto en vídeo como escritas, por lo que la frecuencia de los suicidios por este método aumentó durante varios años.[12][13] La sección australiana “Right to Life” expresó su preocupación de que estas serían usadas por personas vulnerables.Consecuentemente, el método ha ido ganando partidarios tanto en Estados Unidos como en Europa como una forma de morir segura, rápida e indolora.El psiquiatra holandés, Boudewijn Chabot, en su libro de 2015 "Dignified Dying", califica este método complementado con gas inerte como “rápido, indoloro y seguro”.UU. en prohibir legalmente la distribución de estos equipos que contenían este método para el suicidio.Ambos autores escribieron:[29] A menos que la bolsa esté atada alrededor del cuello con una ligadura lo suficientemente tensa para obstruir la sangre que vuelve de la cara y la cabeza, en nuestra experiencia, esas personas nunca presentan petequia facial ni conjuntiva.Las personas con tensas ataduras alrededor del cuello son reconocidas instantáneamente por la plétora facial y numerosas petequias.Somos conscientes de que algunos observadores pueden haber visto una petequia ocasional en ejemplos poco comunes del suicidio mediante este método.En 2010, Ogden y sus compañeros observaron cuatro casos sobre el suicidio asistido con helio entregado mediante máscara facial.[30] Ogden ve la bolsa junto con el gas inerte como “la forma más rápida de morir; usada correctamente, estás inconsciente tras la segunda respiración y muerto en unos diez minutos”.