Su inventario en la actualidad está en los 2 millones y todo el tiempo recibe donaciones de ciudadanos de toda índole y empresas interesadas en la cultura, siendo esta la base del porque su fondo bibliográfico es numeroso.
[2] Los ciudadanos que destacaron entre los primeros donantes de obras para la biblioteca fueron el Dr.
Los señores Mateus y Sáenz obsequiaron 48 varas petate para el pavimento del local de la biblioteca.
El señor Agustín Coronel entregó en donación una Carta Geográfica del Ecuador y unas estampas.
El doctor Santiago Navarro Viola, abogado argentino asesinado vilmente por García Moreno en 1865, entregó un escritorio.
En los 6 años siguientes pasaron varios directores como Isaías Gómez Carbo, Miguel Valverde, Dr. Alfredo Baquerizo Moreno, Manuel Marcos, Gabriel Urbina Jado -chapulo que fue muerto en Daule siendo sepultado en el cementerio de esa localidad y posteriormente trasladados sus restos a Guayaquil su ciudad natal- y otros.
Por estos años fueron donadas las bibliotecas de Federico Cornejo, Luciano Jaramillo y del Dr. Gómez.
Fue calificado por el profesor Richard Pattee «El Príncipe de los Bibliógrafos Ecuatorianos» Su inmenso amor por Guayaquil lo llevó a comprar todo tipo de publicación ya sean libros, revistas y periódicos, gracias a su labor se pudo rescatar los periódicos del siglo XIX que por obra del destino se habían salvado del flageo de 1896.
En la sala se realizan talleres en donde varios aficionados crean sus propios materiales sobre temas locales o de intereses específicos y diferentes actividades.