En la jerga casual japonesa tsunde-oku significa apilar cosas para luego marcharse, y dokusho quiere decir leer libros.
[2] Relacionado con el tema está Bibliomanía, un manga de terror escrito e ilustrado por Macchiro y Obaru.
Esta era en aquella época su aspiración suprema, y compraba tomos sin otro objeto[...] Un día, a don Avelino se le perdió la llave de la biblioteca.
Al día siguiente se encontró con la puerta cerrada; quiso des- cerrajarla, pero luego pensó y dijo: —¿Para qué?
Inspirado en un caso real, narra la historia del monje Giacomo, capaz de matar y morir por su pasión bibliófila, incluso si esta le condena a los infiernos.