Beagle Terrier

Inicialmente, se ofrecieron a la venta dos versiones en el mercado civil a partir de 1960: En 1962 se presentó el Beagle A.61 Terrier 2 con un plano de cola de mayor envergadura, carenados en las ruedas y hélice metálica.

El Terrier no fue un éxito económico para el fabricante, ya que se descubrió que se dedicaban más horas de trabajo en reconstruir cada avión después de su uso militar que en construir el avión nuevo para el Ejército.

También quedó obsoleto ya que, en 1961, la mayoría de los fabricantes competidores introdujeron nuevos diseños totalmente metálicos, con trenes de aterrizaje triciclos y propulsados por motores más modernos como el Lycoming o el Continental (por ejemplo, el Cessna 150 y el Piper Cherokee).

Sin embargo, el Terrier ha encontrado muchos adeptos entre los pilotos propietarios de aviones ligeros antiguos.

Se compraron ejemplares de este modelo en el Reino Unido, Irlanda, Alemania, Países Bajos, Nueva Zelanda y Suecia.

Terrier 2 en 1965, llevando los colores aplicados en fábrica y equipado con un largo silenciador.