Batalla del cabo Esperanza

La Armada japonesa prometió apoyar la ofensiva prevista por el ejército entregando tropas, equipo y provisiones necesarios a la isla, intensificando los ataques aéreos contra el Campo Henderson y enviando buques de guerra para bombardear el campo de aviación.Gotō partió de las islas Shortland hacia Guadalcanal a las 14:00 del mismo día.[13]​ Para proteger el avance del grupo de refuerzos a Guadalcanal contra la Cactus Air Force (CAF), la 11.ª Flota Aérea japonesa, con base en Rabaul, Kavieng, y Buin, planeó dos ataques aéreos al Campo Henderson para el 11 de octubre.Acentuando la importancia de este convoy para los planes japoneses, se ordenó que el último vuelo del día permaneciera estacionario sobre el convoy hasta el anochecer; luego los aviones debían amerizar y sus pilotos esperar ser rescatados por los destructores.[15]​ Hasta este momento, los aliados habían sido derrotados en todas las batallas nocturnas en superficie contra la Armada japonesa, perdiendo ocho cruceros y tres destructores sin haber logrado hundir un solo buque de guerra japonés.A pesar de que el Helena y el Boise llevaban un nuevo radar, muy mejorado, Scott eligió al San Francisco como su buque insignia.A las 22:20, Jōjima se comunicó por radio con Gotō y le dijo que no había naves estadounidenses en el sector.El buque insignia de Gotō, el Aoba, lideró los cruceros japoneses en una columna, seguido por el Furutaka y el Kinugasa.Sin embargo, los japoneses, cuyas naves no estaban equipadas con radar, continuaron sin advertir la presencia de Scott.Entre las 23:42 y las 23:44, el Helena y el Boise informaron sobre sus contactos a Scott en el San Francisco, quien creyó equivocadamente que los dos cruceros en realidad habían rastreado a los tres destructores estadounidenses que quedaron fuera de la formación durante el viraje de encolumnamiento.Scott se comunicó con el Farenholt para preguntar si el destructor intentaba reasumir su posición al frente de la columna.El radar del San Francisco registró las naves japonesas, pero Scott no fue informado de la detección.A las 23:46, suponiendo todavía que Scott estaba al tanto de la rápida aproximación de los buques japoneses, el Helena se comunicó por radio para que le fuera otorgado el permiso para abrir fuego, usando la petición del procedimiento general, "Interrogatory Roger" (básicamente significa, "¿Tenemos vía libre para actuar?").Tras la recepción del mensaje de Scott el Helena, pensando que contaba con autorización, abrió fuego, seguido rápidamente por el Boise, el Salt Lake City, y para enorme sorpresa de Scott, el propio San Francisco.[23]​ Scott, aún inseguro acerca de a quién estaban atacando sus naves, y temiendo que pudieran ser sus propios destructores, ordenó un alto al fuego a las 23:47, si bien no todas las naves acataron la orden.Scott ordenó al Farenholt que hiciera destellar sus señales de identificación y después de observar que el Farenholt estaba cercano a su formación, ordenó reanudar el fuego a las 23:51.Las naves de Scott cambiaron el fuego al Furutaka, que venía por detrás del Aoba.A las 23:49 el Furutaka fue alcanzado por proyectiles en sus tubos lanzatorpedos, iniciándose un gran incendio que atrajo aún más los disparos de las naves estadounidenses.A las 23:58, un torpedo del Buchanan alcanzó al Furutaka en la sala de máquinas delantera, causando graves daños.La explosión resultante mató a casi 100 hombres y amenazó con hacer explotar la nave.Sin embargo, a las 12:00, tuvieron que abandonar sus esfuerzos cuando cedieron los tabiques herméticos interiores del Duncan haciendo que la nave finalmente se hundiera a 10 km al norte de la isla de Savo.Los soldados estadounidenses embarcados en botes desde Guadalcanal, así como el McCalla, rescataron a los dispersos sobrevivientes del Duncan en el mar alrededor de Savo.Los japoneses rechazaron inicialmente todos los intentos de rescate pero accedieron un día después a ser recogidos y tomados como prisioneros.A las 07:00, cinco bombarderos SBD Dauntless de la Cactus Air Force atacaron al Kinugasa pero no le infligieron ningún daño.Mientras tanto, el Aoba y el Hatsuyuki alcanzaron el santuario de la base japonesa en las islas Shortland a las 10:00.Un SBD alcanzó con una bomba al Natsugumo, casi directamente en el centro del barco, mientras que otras dos fallaron por poco aunque contribuyeron a dañarlo severamente.[33]​ Scott reclamó que sus fuerzas hundieron tres cruceros japoneses y cuatro destructores.[34]​ A pesar de ser una victoria táctica para los Estados Unidos, Cabo Esperanza tuvo poco efecto estratégico inmediato sobre la situación en Guadalcanal.Aplicando incorrectamente las lecciones aprendidas en esta batalla, los comandantes estadounidenses en las subsiguientes batallas navales nocturnas en las Islas Salomón intentaron constantemente probar que el fuego naval estadounidense era más eficaz que los ataques de torpedo japoneses.Un oficial subalterno del USS Helena escribió más tarde: "Cabo Esperanza fue una batalla trilateral en la cual la suerte fue el ganador principal".
Vista aérea del Campo Henderson en Guadalcanal , el 7 de agosto de 1942.
Aviones de las fuerzas aliadas llenan el Campo Henderson en Guadalcanal , en octubre de 1942.
El área de las Islas Salomón en el Pacífico Sur . La base japonesa en Rabaul está en la parte superior izquierda. Guadalcanal (inferior derecha) se localiza en el final sureste del estrecho de Nueva Georgia , la ruta utilizada por las misiones japonesas de Tokyo Express.
Aritomo Gotō , contraalmirante japonés.
Mapa que muestra los movimientos de las fuerzas de Gotō y Jōjima durante la batalla. La línea gris clara que bordea la isla de Savo representa las rutas de aproximación y salida previstas por Gotō para la misión de bombardeo. Al Hatsuyuki se le nombra erróneamente como Murakumo .
Mapa de la Armada de los Estados Unidos que representa exactamente los movimientos de las naves estadounidenses (pistas más bajas), mas no las líneas de las naves japonesas (superior, más oscuro).
El crucero estadounidense, Boise en Espíritu Santo , Nuevas Hébridas en agosto de 1942.
El destructor japonés Murakumo .
Un marinero estadounidense a bordo del USS Boise , apunta a un marcador, después del regreso de la nave a los Estados Unidos para su reparación por daños de batalla en noviembre de 1942. El marcador alega que el Boise asistió en el hundimiento de tres cruceros y tres destructores, exagerando enormemente las pérdidas reales japonesas en la batalla.