Batallón de Voluntarios Universitarios de la Real Universidad de Toledo

Se fijó un número de seiscientos hombres distribuidos en cuatro compañías, en las que el mando militar castrense fijaría los oficiales y suboficiales.

Al batallón podían acceder cuantos alumnos y profesores quisieran voluntariamente.

Igualmente se estableció el vestuario, uniformidad y horario de entrenamiento.

La unidad quedó confiada al teniente coronel Bartolomé Obeso, que representaba a la Junta Central.

La unidad permaneció en la zona, combatiendo en los alrededores a lo largo de 1809.