Barrancas tiene una superficie total de 742 km² y se encuentra a 40 metros sobre el nivel del mar.
El sistema presenta en su parte basal un conglomerado poco cementado compuestos por rocas ígneas y metamórficas.
La formación carbonífera de El Cerrejón que caracteriza este período, está cubierta en gran parte por depósitos cuaternarios constituidos principalmente por aluviones que alternan con capas delgadas de arcillolitas calcáreas.
Teniendo en cuenta las diversas formaciones geológicas, sus edades relativas, facies y plegamientos, podemos concluir que los dos macizos tan cercanos el uno al otro, Sierra Nevada de Santa Marta y Serranía de Perijá, muestran diferencias geológicas muy marcadas.
La Serranía de Perijá, al contrario, presenta caracteres marinos, al principio del Paleozoico durante el cual tuvo lugar un gran depósito de sedimentos marinos hasta el final del Permiano en forma discordante.
Las formaciones geológicas presentes en el área, son muy variadas y han sufrido una evolución compleja.
Esta unidad está formada por las tierras bajas aluviales que se inundan durante las épocas de invierno, y se extienden a lo largo de los ríos César, Ranchería y algunos afluentes.
La unidad tiene una amplitud variable hacia la parte montañosa se va estrechando, mientras que hacia el sur del ríos César, comienza a ampliarse y puede llegar a tener hasta 2 km en su parte más amplia.
Esta unidad incluye algunas formas secundarias como pequeños diques, orillares y cauces abandonados.
Las terrazas medias están frecuentemente recubiertas en su parte marginal por pequeños abanicos de poco espesor, los cuales les imprimen un relieve ligeramente inclinado.
Este conjunto a su vez está por encima de las terrazas bajas y es relativamente más antiguo.
Los sedimentos que conforman estos abanicos siguen más o menos un patrón bien definido y de acuerdo con los procesos de sedimentación aluvial: hacia la parte superior o ápice, predominan los materiales gruesos, los cuales van disminuyendo en tamaño y cantidad gradualmente hasta encontrarse en la parte distal sedimentos finos enriquecidos por materiales calcáreos.
En la zona de colinas se observa, a veces, descansos denominados aplanamientos residuales cuyo conjunto forma un modelo escolado.
La Sierra Nevada de Santa Marta se levanta formando un gran macizo montañoso, que circunda las tierras bajas aluviales, el cual está considerado como una parte de la Cordillera Central, con elevaciones que fluctúan entre 1.000 y 5.800 m s. n. m., cuyos puntos más elevados son los picos Colón y Bolívar, cubiertos por nieves perpetuas, donde tienen origen los ríos César y Ranchería, que descienden por el costado oriental y forman la gran zona de tierras bajas aluviales.
Los suelos que se encuentran en el plano aluvial de desborde son generalmente poco desarrollados.
Hasta ahora se han cometido una serie de desórdenes en el uso y distribución del agua.
La cuenca hidrográfica se divide en dos con diferentes características geomorfológicas e hidrológicas, así: Actualmente está siendo sometido a presiones externas fuertes por la tala indiscriminada de los bosques que circundan su cauce.
Arroyo Cerrejón Se forma por la unión de los Arroyos Pesquería, El Salado y El Cerrejón propiamente dicho, que nacen hacia la Serranía del Perijá, sector de Los Estados, Sierra Azul y Punto Claro, y que desemboca en el Río Ranchería pasando cerca al Caserío de Chancleta, hacia el Norte, aunque su caudal es mínimo en épocas de verano intenso y su calidad notablemente degradada.
“Las minas Oreganal y Cerrejón Central están localizadas en una región baja conocida como la "Baja Guajira”, entre la Sierra Nevada de Santa Marta hacia el occidente y la Serranía de Perijá hacia el oriente.
Se concentran estos depósitos en la zona marginal de la cabecera municipal hacia el Sur y Este, en vecindades del río Ranchería.
Se efectúan tumbas y quemas para realizar apenas una cosecha, normalmente de pancoger.
[5] Aunque la vegetación natural ha disminuido por la acción del hombre, se encuentran áreas donde existen especies forestales valiosas, especialmente en las colinas.
Se caracteriza por presentar especies pioneras y regeneración natural de algunas especies arbóreas y arbustivas como Lechoncito, Maíz tostao, Jayito, Espinito blanco, Puy, Pastelillo, Escobilla; otros como la Hierba zorro, Canutillo, Arruinarico.
Este tipo vegetativo se encuentra en El Cerrito, Crucetal, Sitio Nuevo, Arroyo Hondo, Tamaquito, y Sestiadero.
Se comportan como corredores para la dispersión de la biota silvícola y como albergue para la fauna silvestre representando el típico pedobioma freatofito.
Las especies predominantes son Guácimo, Higuerón, Copey, Algarrobo, Roble, Buche de Paloma, Mulato, Coa y Jobito, principalmente.
Potreros Este tipo de cobertura corresponde a la que actualmente se encuentra en pastoreo o en abandono, constituida por praderas degradadas, con dominancia de estratos herbáceos y arbustivos y algunos pastos cultivados.
También son abundantes pájaros como el cucarachero, azulejo, carpintero y bichofué; mientras que especies como canarios, pico gordos, sinsontes, cardenales, turpiales, pericos, cotorras y guacamayos, son cada vez más escasos por el auge de su comercio.
Al igual que la artropofauna, herpetofauna y moluscos asociados a la hojarasca en el suelo.
El municipio de Barrancas se encuentra interconectado directamente al sistema urbano regional de Riohacha, lo cual le permite cumplir relaciones económicas y productivas con municipios cercanos como Riohacha y Maicao, destacándose la actividad comercial del contrabando en menor escala y la economía extractiva del carbón en mayor nivel.