Los atrapanieblas o captanieblas son un sistema para atrapar las gotas de agua microscópicas que contiene la niebla.
Desde los años 1960, diversos investigadores habían concebido el aprovechamiento del agua en las camanchacas.
Los atrapanieblas que se usan en los pueblos del norte chileno fueron desarrollados en conjunto con científicos israelíes.
Este marco contiene una malla plástica que facilita la condensación de la niebla.
Estos dispositivos se instalan en sitios altos, que se hallen expuestos a la camanchaca y están conectados por tuberías a estanques de depósito de agua.
Desde los años 80 del siglo XX han sido numerosos las experiencias realizadas en las islas canarias que, debido a sus condiciones geo-climáticas, presentan las condiciones idóneas para la captación de nieblas, con influencia del "mar de nubes" durante gran parte del año, sobre todo en las islas de mayor altitud.
La mayor parte de estas investigaciones se llevaron a cabo con captadores planos o tipo chileno por investigadores como Luis Santana Pérez y Mª Victoria Marzol Jaén (Universidad de La Laguna).
Para reducir los posibles daños provocados por vientos fuertes, estos captadores inicialmente se idearon con un sistema de bisagras en su base para poder ser tumbados.