Rocío (fenómeno físico)

El rocío o sereno es un fenómeno físico-meteorológico en el que la humedad del aire se condensa en forma de gotas por la disminución brusca de la temperatura, o el contacto con superficies frías.

El enfriamiento adecuado de la superficie suele producirse cuando ésta pierde más energía por radiación infrarroja de la que recibe por radiación solar, lo que ocurre especialmente en las noches despejadas.

También actúan cuando las gafas se empañan en una habitación cálida y húmeda o en procesos industriales.

En la mayoría de los climas del mundo, la media anual es demasiado pequeña para competir con la lluvia.

En las regiones con temporadas secas considerables, las plantas adaptadas, como los líquenes o los plantones de pino, se benefician del rocío.

[4]​ Muchos organismos, plantas, insectos y animales “beben” rocío para vivir o, en ocasiones, sobrevivir, especialmente en regiones áridas y semiáridas, donde a veces es la única fuente de agua durante meses o incluso años.

Allí se encuentran comunidades de líquenes relativamente hidrofíticos, incluso sobre las espinas de los cactus (donde el efecto punta permite que la espina capture el rocío, que fluye hacia el cactus).

El libro De Mundo (compuesto antes del 250 a. C. o entre el 350 y el 200 a. C.) describía: El rocío es la humedad diminuta en su composición que cae de un cielo despejado; el hielo es el agua congelada en forma condensada de un cielo despejado; la escarcha es el rocío congelado, y el "rocío-escarcha" es el rocío que está medio congelado.

El rocío, conocido en Hebreo como טל (tal), es significativo en el religión judía por motivos agrícolas y teológicos.

El primer día de Pascua, el Paitán, vestido con un kittel blanco, dirige un servicio en el que reza por el rocío entre ese momento y Sucot.

Hay muchos midrashim que se refieren al rocío como la herramienta para la resurrección final.

En la actualidad, la Organización Internacional para la Utilización del Rocío (OPUR, International Organization for Dew Utilization) está trabajando en condensadores eficaces, basados en láminas, para regiones donde la lluvia o la niebla no pueden cubrir las necesidades de agua durante todo el año.

Estos condensan el rocío y la niebla para suministrar agua potable limpia.

Para su medición, se colocan plantas, hojas o columnas enteras de suelo en una balanza con su superficie a la misma altura y en el mismo entorno que se produciría de forma natural, proporcionando así un pequeño lisímetro.

Gotas de rocío sobre una hoja.
Rocío de la mañana en Siberia.
Telaraña con rocío de la mañana, mejorando su visibilidad.
Bajo temperaturas frías, el rocío puede congelarse y formar una capa de hielo sobre plantas y objetos.
Rocío primordial "Maientau". Pequeño libro de destilación . 1500. Obra de Hieromymus Brunschwig .