Atentado de La Bomba

[5]​ Para entonces ya tenían comprado al cochero del presidente, a quien habían sobornado con cincuenta mil pesos; éste, al llegar a lugar indicado, fingió que se le rompió una rienda y se detiene justo sobre el artefacto explosivo mientras los conjurados interaron detonar la bomba sin éxito.

[5]​ Un cable había hecho corto circuito y a pesar de que intentaron detonar el artefacto explosivo diecisiete veces, no lo lograron.

[11]​ El carruaje se detuvo a unas pulgadas más allá de donde debía haberlo hecho.

Pero al ver la fisonomía decidida del presidente, el hombre se acobardó y no le disparó.

[13]​ Además, dedujo que quien dirigió la instalación era un experto en la materia, pues todas los detalles fueron cubiertos a cabalidad.

[11]​ Gamboa replicó en fuertes términos ya que si bien anteriormente había albergado a desafectos al régimen, esto se trataba de una cuestión muy diferente; incluso manifestó en la misiva que estaba dispuesto a violentar el principio de extraterritorialidad.

[4]​ Gamboa aceptó a las muchachas pero envió al jovencito de regreso, para que ayudara a sus familiares sin imaginarse que durante el cateo policiaco se lo llevarían prisionero y luego lo torturarían en la dirección de la policía.

Pero cuando iban a subir al ferrocarril en Guastatoya un testigo advirtió los pantalones masculinos debajo del vestido y fueron apresados por elementos militares de Zacapa.

Por su parte, Felipe y Rafael Prado Romaña intentaron huir hacia El Salvador en cortas jornadas nocturnas para evitar retenes y puestos militares en las montañas; pero extraviados, se refugiaron en un rancho cuyo dueño los denunció; fueron enviados a prisión, donde murieron años más tarde.

[21]​ Pero los principales comprometidos no se encontraban y el presidente puso precio a sus vidas.

[21]​ Solamente el colombiano Rafael Madriñán pudo escapar en su bicicleta, aprovechando la confusión de los policías tras la explosión.

[24]​ Ese mismo día, al regresar de un paseo a la Avenida Reforma, adonde había acudido con sus secretarios, el cónsul, y el cochero –todos armados como precaución por la situación imperante–, el embajador Gamboa recibió una llamada de la esposa del embajador español solicitándole que la visitara; allí la dama le explicó cómo los autores del atentado se habían escondido en la casa de los Romaña –reconocidos conservadores aristócratas guatemaltecos– y cuya abuela los había trasladado a la legación española aprovechando un escondite que esta última tenía.

[25]​ La esposa del embajador le solicitó que los sacara de la casa, pues era muy difícil la situación en ese momento.

[31]​ A las tres de la mañana se escucharon los golpes a la puerta, la cual fue derribada pocos después; las tropas, comandadas por el coronel Urbano Madero se dirigieron a las escaleras en el segundo nivel pero allí los repelió el doctor Julio Valdés Blanco, quien acabó con la vida del coronel Madero de un tiro y se parapetó junto con sus compañeros de infortunio.

[30]​ Pero otras versiones –que quedarían confirmadas por las fotografías tomadas por José García Sánchez y en las que se advierten discrepancias en las posiciones de las manos y brazos de los caídos– se habrían rendido, pero el ejército los habría asesinado.

[38]​ Allí fue capturado y cuando fue indagado dijo que no estaba enterado en lo absoluto del complot en contra del presidente, y que tampoco había incitado a sus mozos a rebelarse contra el gobierno.

Díaz tenía la intención de invadir Guatemala en represalia, pero al final se convenció de no hacerlo cuando se dio cuenta de que un general triunfador en Guatemala sería un duro contendiente en las elecciones presidenciales mexicanas;[45]​ Díaz, además, temía las posibles represalias que a su vez podrían adoptar los Estados Unidos ante una invasión mexicana a su aliado centroamericano.

El licenciado Estrada Cabrera, su jefe del estado mayor José María Orellana y Joaquín Estrada, hijo del presidente, tras la detonación. [ 2 ] ​ Los tres resultaron milagrosamente ilesos.
Federico Gamboa , escritor y diplomático mexicano que estaba fungiendo como embajador de su país en Guatemala durante los días en que se produjo el atentado contra Estrada Cabrera. [ 4 ]
Ciudad de Guatemala en 1915. Grabado del Libro Azul de Guatemala . [ 27 ] ​ Obsérvese las fronteras naturales de la ciudad de entonces, y que la misma solamente ocupaba el área del moderno Centro Histórico.
17. a calle y 9. a avenida del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala en diciembre de 2015. En ese lugar ocurrió el atentado de la bomba en 1907.