El mar que rodea la multitud de grupos de islas está cubierto por hielo fijo en el invierno y se halla obstruido por hielo incluso en el corto verano, que dura apenas unos dos meses en un año normal.
No hubo nunca ningún asentamiento humano en ninguna de las islas del archipiélago, con excepción de dos estaciones meteorológicas, una permanente que operó en la isla Ruski entre 1935 y 1999 y otra más esporádica, en isla Tirtov (Tirtova) (1940-1975).
Transcurrió más de un siglo antes de que otro explorador, el barón Adolf Erik Nordenskiöld durante su épico viaje desde el Atlántico hasta el Pacífico por la Ruta del Mar del Norte navegara en torno a estas islas y confirmara su existencia.
Navegando entre estas islas heladas y no exploradas, con su barco, Nansen tuvo la experiencia del agua muerta.
El capitán Matisen atravesó toda la vasta zona helada entre las islas sobre un trineo tirado por perros.
Después de oponer la mayor resistencia posible al crucero alemán más moderno y mejor equipado, el Sibiryakov fue hundido en una batalla desigual.
Los animales más comunes en tierra firme son el lemming de la tundra (Lemmus lemmus), el correlimos morado (Calidris maritima), el playerito blanco, el correlimos menor y el vuelvepiedras (género Arenaria), que disfrutan del ecosistema del archipiélago con muy poca interferencia humana.
Las investigaciones científicas sobre la fauna y la flora del archipiélago Nordenskiöld se llevaron a cabo utilizando como base la estación ártica de la isla Russki.