[1][2] Está asociado con el antiespecismo, el antirracismo, el feminismo y el transhumanismo.
[1] La filosofía antinaturalista está estrechamente vinculada al movimiento francés por los derechos de los animales y al feminismo materialista.
[3] Los defensores más notables incluyen a David Olivier e Yves Bonnardel.
[4] Los antinaturalistas defienden la permisibilidad moral inherente y absoluta del aborto, la modificación corporal, el divorcio, la anticoncepción, la cirugía de reasignación de sexo y otros medios mediante los cuales creen que los seres humanos pueden asumir el control de sus propios cuerpos y de su propio entorno.
[3] El antinaturalismo contrasta con algunos movimientos ambientalistas radicales, que afirman que la naturaleza en sí misma es sagrada y debe ser preservada por su propio bien; en cambio, promueve la idea de que todos los actos humanos son naturales y que la preservación ecológica es importante en la medida en que es necesaria para el bienestar de los seres sintientes, no debido a algún atributo inherentemente sagrado de la naturaleza en su conjunto.