A diferencia de otros crustáceos como los decápodos, no presentan caparazón.
De los siete pares de apéndices restantes los dos primeros, más desarrollados y llamados gnatópodos, son utilizados para capturar el alimento, mientras que los cinco pereiópodos restantes suelen ser locomotores.
Muchas especies de anfípodos pelágicos son mutualistas o (usualmente) parásitos, viviendo en asociación con invertebrados Scyphozoa y Salpidae.
Otros anfípodos bénticos son el alimento primario de las Eschrichtius robustus ballenas grises.
Curiosamente, una de ellas produce un compuesto que se está probando para tratar el Alzheimer[cita requerida].