Aminandro

[3]​ Estuvo presente en una conferencia entre Tito Quincio Flaminino y el rey macedonio Filipo V,[4]​ y durante la tregua subsiguiente el cónsul romano le envió a Roma, dado que se consideraba necesario que el Senado romano ratificara el acuerdo.

[6]​ En el tratado de paz se le concedió la posesión de todas las fortalezas que había conquistado a Filipo durante la segunda guerra macedónica.

[8]​ En 191 a. C. Roma inició la guerra contra Antíoco III el Grande.

Aminandro, influido por su cuñado Filipo Megalopolitas, guerreó junto a los seléucidas.

[9]​ Los romanos exigieron a los etolios la extradición, que no fue concedida.