Además laboró como Catedrático en la asignatura de historia universal en el Heroico Colegio Militar.
No habiendo logrado su objetivo, fue designado juez séptimo del ramo civil en la Ciudad de México, DF., cargo que desempeñó honorablemente en los años de 1923-1927.
A pesar de su corta permanencia en el poder, en el ramo jurídico efectuó destacadas obras, entre las que sobresalen: por conducto de una Comisión de abogados que nombró, se reformaron los Código civil y el Código penal; se formuló el reglamento de tierras ociosas, la ley de tribunales para menores e incapacitados, la Ley que establecía la condena condicional de los delincuentes primarios, el reglamento para el descanso obligatorio y pago del séptimo día, el reglamento de la inspección estatal del trabajo, la ley que creó el Departamento de Asistencia Social y Proletaria (adoptada más tarde por el gobierno federal, creando la Secretaría de Asistencia Pública).
Ha sido el único titular de la dependencia en cuestión, que en forma sistemática y, personal, supervisó mediante visitas a distintas horas de la noche y de la madrugada, la conducta y actividades de los agentes investigadores del Ministerio Público, en las delegaciones urbanas y foráneas del Distrito Federal.
[3] De 1941 a 1952, ejerció la abogacía en su despacho profesional, instalado en la capital del país.
Simultáneamente fue abogado postulante y notario público hasta 1964.
Este cargo honorífico, lo ostentó también hasta el día de su muerte.
En esta acción se dio la puntilla al movimiento conservador, en la región indicada.