Tuvo un desempeño notable combatiendo a los filibusteros ingleses que en esa época asolaban los litorales de la península de Yucatán, particularmente en la región oriental, en la desembocadura de los ríos Walix, Hondo y Nuevo.
Recorrió por mar y tierra las entonces inhóspitas regiones peninsulares y dejó entre los indígenas de la zona grata memoria, al punto de que cuenta el historiador José María Valdés Acosta que cuando se retiró de los menesteres de la guerra, los pobladores iban a buscarlo para que regresara a vivir entre ellos como gobernador.
[2] Peón Valdés promovió la creación del batallón de milicias blancas de Mérida que comandó hasta su muerte en 1805.
Fueron también capitanes de este batallón sus hijos José Julián y Alonso Luis.
Este último fue muchos años después nombrado por Maximiliano de Habsburgo ministro plenipotenciario en Italia, donde le tocó presenciar los eventos finales del segundo imperio mexicano y el retorno de la emperatriz Carlota a Europa, una vez que esta quedó privada de sus facultades mentales y fue trasladada al castillo de Miramar en 1866.