Pero para establecer rutas desde Italia hasta África, Ala Littoria tuvo que superar muchos obstáculos geográficos y desafíos logísticos.
Las tres mayores compañías aéreas, SAM, SISA y SANA, se repartían por igual el mercado de la aviación civil italiana, transportando unos 10000 pasajeros al año en 1930.
Sin embargo, la aerolínea ALI (Avio Linee Italiane), propiedad del Grupo Fiat, no participó en este proceso de fusión.
[11] Conectaba con una frecuencia de cuatro vuelos semanales Roma con Mogadiscio en el África Oriental Italiana una ruta con una extensión de 6.370 km utilizando hidroaviones Cant Z.506 hasta Bengasi y luego con trimotores S.73, a El Cairo, Wadi Halfa, Jartum, Kassala, Asmara, Addis Abeba (con cambio avión) y finalmente Mogadiscio.
Con este nuevo avión, Ala Littoria impulsó todas sus rutas, en particular la Linea dell'Impero que unía con cuatro vuelos semanales Roma con Bengasi y (algunos sin escalas) Adís Abeba.
[15] Durante la II Guerra Mundial el Estado Mayor del Aire impuso la militarización de la flota comercial civil, que quedó bajo el control del Comando Servizi Aerei Speciali (CSAS), creado específicamente para utilizar con fines militares los aviones de la flota civil italiana, siendo encuadrados en los Nuclei Comunicazione servidos por las compañías aéreas.
Al finalizar la contienda la aerolínea, con una flota considerablemente mermada fue disuelta, siendo sustituida en 1946 por Alitalia-Linee Aeree Italiane predecesora de la actual Alitalia.