Abelardo Moralejo Laso

Ayudado por un hermano sacerdote, hizo el bachillerato en el Instituto de Zamora (1911-17).

Pasó entonces a la Universidad Central de Madrid para realizar el doctorado, al tiempo que ampliaba estudios y colaboraba con el Centro de Estudios Históricos que dirigía Ramón Menéndez Pidal.

En 1926 presentó la tesis doctoral, dirigida por el profesor y académico Julio Cejador, que versaba sobre las oclusivas sonoras aspiradas del latín.

Su condición de profesor numerario residente, en años en que era corriente usar el puesto en Santiago como trampolín para optar la otros destinos, hizo que estuviera casi siempre en cargos, como decano o secretario de la facultad de Filosofía y Letras, o bien en otros cargos directivos de la universidad.

Moralejo Laso se jubiló en el año 1968, aunque, precisamente, publicó a partir de ese momento con mayor frecuencia.