Abd el-Krim (Axdir, 1882[2] o 1883-El Cairo, 6 de febrero de 1963),[3] cuyo nombre completo era Muhammad Ibn 'Abd el-Karim El-Jattabi (en árabe: محمد عبد الكريم الخطابي; en bereber tamazight: ⵎⵓⵍⴰⵢ ⴰⴱⴷⵍⴽⵔⵉⵎ ⴰⵅⵟⵟⴰⴱ), fue un político y líder militar rifeño.Sus tácticas guerrilleras posteriormente influyeron en otros líderes como Hồ Chí Minh, Mao Zedong y el Che Guevara.Para ello se financió a cuenta de negociaciones con empresas mineras como la española Setolazar (Setuaín, Olovarriaga y Zárate), la alemana Manesmann o la inglesa The Syndicat Mineral Morocco, promovida por el espía inglés Charles Gardiner, para otorgar concesiones sobre las supuestas riquezas mineras del Rif.En julio, los rifeños atacaron y diezmaron a una fuerza muy superior en tamaño en el minúsculo fuerte de Annual, en el este del Rif, logrando una asombrosa victoria que nadie se esperaba debido a la disparidad de fuerzas.Los rifeños, confiados tras esta victoria inicial, continuaron su avance hacia el este y lograron hacerse con más de ciento treinta puestos militares españoles.[20] Las bandas rifeñas lograron llegar hasta las afueras de Melilla, pero Abd-el-Krim decidió no asaltar la ciudad.[21] Tras haber puesto en fuga a las fuerzas españolas y ya bajo el mandato firme de Abd-el-Krim, el Rif se organizó como territorio independiente y logró arrebatar más territorios a las tropas españolas, que durante los siguientes años quedaron reducidas prácticamente a la zona de Melilla, por el este, y a Ceuta, Tetuán y Larache por el oeste.El nuevo Estado norteafricano, con capital en Axdir, llegó a contar con su propia administración, justicia y hacienda.[26] En Reunión las autoridades francesas le facilitaron una cómoda vivienda y también la percepción de un generoso salario anual.Sin embargo, Abd el-Krim logró escapar durante una escala en la ciudad egipcia de Puerto Saíd.El rey Faruq I, sometido a Reino Unido, lo acogió como refugiado.
Abd-el-Krim con el empresario español
Horacio Echevarrieta
, con quien negoció la devolución de prisioneros españoles tras el desastre de Annual (1923).
Abd el-Krim bajo custodia francesa, en Fez, a punto de subir al tren que le llevaría al exilio (1926).