República del Rif

Algunas tribus confederadas de la región montañosa del Rif adoptaron ese nombre para designar al territorio independizado de España durante la guerra que realizaron contra el país europeo, entre 1921 y 1926 (guerra del Rif).

Abd el-Krim y los dirigentes rifeños se negaron a aceptar la soberanía del Sultán de Marruecos sobre el Rif que le exigían las potencias europeas como condición para establecer la paz.

Fue fundado en el año 710 Himyari, por un inmigrante de Yemen, Salih ibn al-Mansur, por concesión califal.

La tribu más importante del Rif a principios del siglo XX era la de los Ait Wariaghel, conocida en la historiografía española como Beni Urriaguel (de su nombre árabe, بني ورياغل bani waryaghel).

Los españoles penetraron en el Rif al principio realizando pactos con los jefes locales y estableciéndose en pequeñas posiciones que generalmente tenían la forma de blocaos.

En 1921 las tribus del Rif central se sublevaron, entre ellas la de Beni-Urriagel comandada por Abd el-Krim, notable de los Ait Wariaghel, justo en el momento en el que las tropas españolas se aventuraban a establecer posiciones más arriesgadas y desprotegidas.

Esta victoria rifeña dio inicio a una guerra que se prolongó hasta 1926.

El planteamiento fue aceptado con un gran entusiasmo por los rifeños, así fueron invitados a participar los representantes de las cabilas.

En el mismo acto se acordaron varios puntos importantes, entre ellos la independencia del Rif.

El siguiente paso, fue la formación de un gobierno moderno, para poner fin a las viejas estructuras tradicionales, e introducir un modelo democrático basado por una administración muy representativa.

Se creó una policía secreta, que proporcionó información precisa y de gran importancia al Gobierno del Rif.

El Ministerio de Hacienda rifeño, a cargo de Abdeselam, tío paterno de Si Mohammed (tío materno según Sigifredo Sainz, cautivo en Axdir), recaudaba básicamente por los rendimientos del Habus y el impuesto coránico del Axor, que Goded (Las etapas, 1932) sustituye por el Tertib, un impuesto no tradicional, preconizado por las potencias europeas, que en su día provocó protestas populares en todo Marruecos, completando los ingresos las multas impuestas a poblados y kabilas y los derechos de zocos.

Todo este montaje se deshizo poco tiempo después, pues el tal Gardiner resultó ser un estafador oportunista, sin medios materiales y financieros para llevar a cabo lo establecido en las cláusulas del contrato firmado.

El sistema penal fue complicado debido a que antes de la República no había códigos escritos y no había un límite entre los delitos de índole civil y los estrictamente militares.

Los caídes que fracasaban en la acción bélica eran revocados del mando de sus unidades.

El primer paso fue traer a un médico de Fez, especialista en medicina general.

Ruinas de una base militar española en Tanaqob
Retrato de Abd el-Krim , presidente y fundador de la república