Mehmed III

Mehmed era conocido por ordenar la ejecución de sus hermanos y liderar el ejército otomano en la guerra turca larga, durante la cual el ejército otomano obtuvo la victoria en la batalla decisiva de Keresztéte, en Hungría.

Su figura es tristemente célebre en la historia de la Dinastía Otomana por haber hecho estrangular a sus diecinueve hermanos en pos de una sucesión sencilla para su persona.

Fue el único sultán en el Imperio Otomano, que no estuvo en asuntos políticos y relaciones internacionales, ya que dejó todo su poder y responsabilidades a su madre, Safiye Sultan.

Su madre Safiye Sultan, gobernaría ella el Imperio Otomano algo similar durante el reinado de Murad III donde Safiye tendría mucha influencia siendo Cogobernante y jefa de la corte otomana, aunque en este caso ella no compartiría el poder con nadie ya que su hijo le dio todo su poder y responsabilidades.

Durante el sultanato de Mehmed, aunque no se sufrió ningún revés importante, considerando la incipiente decadencia del Imperio, ello no puede atribuirse a la capacidad de gobierno del sultán.