Oberkommando des Heeres o OKH (Alto Mando del Ejército) fue parte de la estructura del Oberkommando der Wehrmacht (OKW) durante la Segunda Guerra Mundial.
Conforme a la tradición militar alemana, la planificación de las campañas bélicas era responsabilidad del Estado Mayor del Ejército de Tierra, mientras que el OKH asumía una función operativa.
Teóricamente el OKH debía estar subordinado al OKW (donde participaban también la marina de guerra y la fuerza aérea) pero la importancia crucial del Ejército de Tierra (Heer) en la lucha contra la URSS causó que el OKW ejerciera un control puramente nominal sobre las actividades bélicas del frente oriental, siendo que el OKH asumió mayores responsabilidades a partir de junio de 1941, dejando muy poco margen a la Luftwaffe o la Kriegsmarine para participar en la planificación ofensiva.
Schörner, no obstante, jamás ejerció el mando efectivo y se mantuvo cercado con las tropas que dirigía en los alrededores de Praga.
Estas instalaciones camufladas, separadas físicamente por una valla, también mantenían mentalidades estructuralmente diferentes hacia sus objetivos.