En 915 es mencionada como un caserío dependiente de Trani; en 1046 se le otorga el estatus de ciudad, cuando el conde normando Peter agranda y fortifica los asentamientos en la zona (que incluye también a Barletta, Corato y Bisceglie).
En 1487 la ciudad fue comprada por los aragoneses, el ducado fue transferido al futuro rey Federico IV de Nápoles.
Posteriormente en 1552, fue vendida por los españoles a Fabrizio Carafa, en la suma de 100 000 ducados.
Los Carafa gobernaron la ciudad hasta 1799, cuando las tropas francesas durante las guerras napoleónicas la capturaron luego de un largo asedio.
Actualmente es la mayor comunidad en la nueva provincia de Barletta-Andria-Trani.