Viveros (Albacete)

La localidad está situada a una altitud elevada, 1012 m s. n. m..[2]​[3]​ No hay grandes elevaciones del terreno, aunque todo está salpicado de pequeñas colinas y depresiones por las que corre el agua en los inviernos lluviosos.

En la fauna destacan de caza como la codorniz, la perdiz, la tórtola, el conejo, la liebre y el jabalí, entre los demás animales hay zorros, gatos, comadrejas, turones, ovejas, y aves como el alcotán, la abubilla, el ánade real, la focha, lechuzas, búhos, mochuelos, gorriones, urracas, cuervos, las avutardas, Dispone de un clima continental con veranos muy calurosos (llegando hasta los 37 °C) e inviernos muy fríos con temperaturas que frecuentemente bajan de los 0 °C, llegando incluso a los -14 °C bajo cero.

Las precipitaciones ocurren principalmente en primavera y otoño en forma de lluvia.

Ya anocheciendo se vuelve al pueblo otra vez de romería.

Posteriormente se va a comer junto al río hasta el anochecer.

Cuando la romería cayó en desuso, la imagen donada a la ermita quedó en El Bonillo, alegando estos últimos que era de su propiedad.

Con ese mismo espíritu, quedan en El Bonillo cuadros que pertenecían a la ermita y objetos litúrgicos.

Sobre todo las fiestas de Viveros se caracterizan por el reencuentro con los amigos con los que de pequeños se jugaba por sus calles, tienen el encanto del reencuentro entre personas foráneas y sus familias.

Corpus Christi Se sacaba en procesión la Custodia bajo palio por todas las calles del pueblo y se le echaban flores en las paradas realizadas en los altares creados para la ocasión.

Escudo de Viveros.