Virgen de Santerón

A mediados del siglo XVIII (1750), fray Roque Alberto Faci escribe:Como ha sido puesto de manifiesto, la narración del hallazgo de la imagen ha evolucionado con el tiempo, ya que en otros relatos el «humilde pastorcito» se convierte en «devoto caminante», incluso en «caballero en brioso cocel»; asimismo sucede con el lugar (escenario) del halazgo, ya que desde un inicial espacio «árido y despoblado», se pasa a una «zona de pasto» que acaba convirtiéndose en un «hermoso prado», evolución que ha afectado también al manantial, que de simple «fuente» acaba convirtiéndose en «fuente cristalina»: se trata pues de un embellecimiento progresivo, como conviene a la idealización (abstracción) de toda leyenda viva que se precie.[4]​-[5]​ En cuanto a la construcción de la ermita, fábrica del siglo XVIII, con cúpula octogonal y artesonado mudéjar -una vecina de Negrón (Vallanca), Felicitas-Sagrario Adalid Novella (1954-2008)-, cantaba unas letrillas al respecto: ¡Oh Virgen de Santerón!/ ¿Quién te ha hecho esa capilla?/ -Entre Vallanca y Negrón,/ Algarra y Garcimolina -alidiendo a que la construcción del ermitorio pudo ser una obra conjunta, costeada por los vecinos de los pueblos y lugares que se citan-.La imagen sedente de la Virgen con Niño fue evaluada por especialistas en valencia, que confirmaron su valor y antigüedad (siglo XIII-siglo XIV), siendo trasladada a Cuenca, por razones de seguridad.La imagen se hallaba muy perjudicada: «El deterioro es grande, habiendo perdido la mano derecha de la Virgen, la cara y mano derecha del Niño, y toda la policromía».Ante tamaña desgracia, el Consejo local convino hacer una rogativa hasta la ermita de Santerón, en Algarra (Cuenca), implorando la intercesión de la Virgen, y su protección: todo el vecindario, precedido por una cruz procesional, autoridades civiles y religiosas incluidas, se encaminaron a la ermita algarreña y se bajaron en andas la imagen de la Virgen a Vallanca, colocándola en el altar mayor, al tiempo que le ofrecían un novenario.
Celebración religiosa en la iglesia parroquial de Vallanca (Valencia), durante el XLI septenario, año 2005.