Virgen con el Niño (Juan de Juni)

[1]​: 1 Nuestra Señora de Duero, imagen titular del priorato, poseía gran devoción entre los fieles de Tudela, quienes acudían con asiduidad al monasterio para realizar ruegos o rezar ante la talla a pesar de la distancia a la que se hallaba el cenobio.

Irónicamente, a finales del siglo xviii la decadente situación del cenobio motivó que la talla fuese conducida definitivamente a la iglesia parroquial, donde hacia 1890, según Juan Ortega Rubio, recibía culto en el altar de las Mercedes y era objeto del mismo grado de devoción que en épocas pasadas.

[1]​: 3–4 [3]​ Del mismo modo destacan sus pequeñas dimensiones (125 cm), lo cual indica que con su reducido tamaño se pretendía facilitar el recorrido de alrededor de 3 kilómetros entre el priorato y la villa.

Esta procesión era realizada por la Cofradía de Nuestra Señora de Duero, existente casi con total seguridad a finales del siglo xvi, aunque el monasterio no llegaría a estar bajo esta advocación hasta principios del siglo xvii, si bien ambas fechas resultan muy cercanas; teniendo en cuenta que la talla está datada en la última etapa de Juni, en torno a la década de 1570[1]​: 4  (aunque también se la fecha hacia 1560),[3]​ la creación de la cofradía y el cambio de denominación del cenobio quedarían explicados por la fama tan rápidamente adquirida por la imagen.

Finalmente la devoción por parte del campesinado llevaría a su traslado a la iglesia de la parroquia tras la decadencia del priorato, estando Nuestra Señora de Duero fuertemente vinculada a la agricultura desde siempre, todo ello reflejado iconográficamente en la Virgen de Juni.

[1]​: 5–6 En lo relativo a la indumentaria, esta muestra dorados en su práctica totalidad, siendo únicamente los bordes del manto donde se ha aplicado policromía, destacando en ellos una elaborada ornamentación consistente en diminutas superficies pintadas y decoradas con labores de esgrafiados sobre un fondo azul intenso.

[3]​ Este detalle resulta poco común ya que dificulta distinguir la túnica del manto al estar ambas zonas tratadas de idéntica forma.

Por su parte, los pliegues exhiben una delicada caída con voluminosas formas, reminiscencia de las obras en barro con las que Juni logró gran fama, pareciendo estos gruesos bultos más un modelado que un tallado.

La talla en sí dibuja una forma oval casi perfecta que dota a la pieza del equilibrio propio de la última etapa del escultor, lo que facilita su datación, haciendo gala la figura del Niño de una pose forzada muy propia de Juni a la vez que muestra un escorzo juguetón que dota de gracia y simpatía a la obra,[1]​: 6  aspecto que recuerda a la Virgen con el Niño emplazada en la sacristía del Real Monasterio de Santa María de Veruela, elaborada por Juni hacia 1560 y que al igual que la Virgen de Tudela posee un cilindro para sostener una corona.

Virgen con el Niño (c. 1560), por Juan de Juni. Real Monasterio de Santa María de Veruela .