El pueblo se alza a 549 metros sobre el nivel del mar.
El águila imperial y el lince, son dos endemismos ibéricos incluidos entre los animales más amenazados del planeta.
A ello hay que sumar el valor que supone la presencia de aves nidificantes como poblaciones amenazadas de extinción como el águila perdicera o el búho real.
Al norte se halla el río Guadiato, que cuenta con una población estable de nutria y abundante fauna cinegética de la que destacan el ciervo y el jabalí, en cuanto a caza mayor, y el conejo y la perdiz, en caza menor.
La vegetación típica es la denominada genéricamente bosque mediterráneo, donde predomina la encina, el alcornoque, los pinos piñoneros y multitud de flora arbustiva como el madroño o la coscoja.