Desastre del río Goldstream El 29 de diciembre de 2011, unos desconocidos vertieron un producto químico en la corriente del río Goldstream en la región de Victoria, una zona ecológica sensible, lo que provocó la insólita coloración verde fosforescente del agua, algo que llamó poderosamente la atención.
Según las autoridades, el compuesto vertido en el río Goldstream no es tóxico para los seres humanos, pero podría causar malas repercusiones en alguna especie animal.
Las investigaciones seguirán hasta dar con los responsables del derrame, señalaron medios locales.
Ese tipo de producto es usado para detectar fugas en tanques sépticos.
Por ser la capital, su economía se basa en el aparato del gobierno provincial y en las universidades locales.