Vicente María Strambi

Educado en la Orden Franciscana fue aprendiendo a vivir los diversos puntos del catecismo.

En el seminario, se sintió llamado a la vida religiosa pero no fue aceptado en la Orden de los Capuchinos y los Vincentianos.

Impresionado por la devoción de la orden, pidió a Pablo ser admitido pero este se lo negó.

Como obispo, Vicente fue sensible a la pobreza y la asumió como estilo de vida.

A pesar de que, según la orden francesa, este decreto debía leerse en todas las iglesias, Strambi se negó.

El papa Pío VII visitó a Vicente y le hizo saber,[8]​ que los invasores franceses habían provocado mucho daño, no solo con la destrucción de iglesias, sino también con la inserción de la amoralidad.

Los franceses fueron derrotados, aunque la población sufrió la brutalidad de estos durante su retirada.

Vicente se encontró con el líder del ejército francés para impedir que entraran en la ciudad y Murat accedió a su pedido.

Fue en ese momento cuando Strambi consiguió reconvertir al catolicismo a la hermana de Napoleón, Paulina Bonaparte.