Ya en la capital catalana empezó a desempeñar diversos trabajos culturales y literarios.
Más adelante militó en Estat Català del que fue dirigente y colaborador de Francesc Macià.
Acompañó en 1928 a Macià durante un viaje por América en el que visitaron Uruguay, Argentina y Cuba.
En noviembre de 1942, Gassol pasó a Suiza y se estableció en Lausana.
Siguió participando en la vida política desde su exilio en Saint-Martin-le-Beau y comenzó a colaborar en diversas publicaciones.
Gracias a sus escritos en los que utilizaba una fuerte oratoria, se convirtió en un ejemplo de catalanismo radical.
Frases célebres: "Nuestro odio contra la vil España es gigantesco, loco, grande y sublime.