Unión Malaya

La Unión Malaya otorgó los mismos derechos a las personas que deseaban solicitar la ciudadanía.

Sin embargo, la propuesta de ciudadanía nunca se implementó realmente.

Se nombró a un gobernador con jurisdicción sobre el nuevo territorio, dando así carácter oficial al mandato colonial directo.

[4]​ Los malayos se opusieron, en su mayoría, a la creación de la Unión.

Al descontento se sumaron los oficiales imperiales de origen malayo, insatisfechos en la forma en que se llevaban a cabo las reformas, pues argüían que entraban en conflicto con la Carta del Atlántico.

Las leyes permitían que los extranjeros conservasen su anterior nacionalidad, y esto podría ser utilizado por los inmigrantes chinos e indios en beneficio de sus países de origen, perjudicando a la Unión.